Investigación científica, comunicación y proyectos de control del fuego también forman parte de la estrategia de conservación del Cristalino que lleva adelante la FEC
Con refrigerio incluido y una camiseta estampada con una imagen de jaguar, los proyectos de educación ambiental de la Fundación Ecológica Cristalino (FEC) fascinan a las infancias de Alta Floresta, en el estado de Mato Grosso. Entre las distintas actividades se incluyen caminatas por la selva, dinámicas en la naturaleza, excursiones en el bosque y narración de cuentos protagonizados por personajes de la biodiversidad amazónica.
La idea es despertar la curiosidad mediante el juego para así sensibilizar a las infancias respecto al cuidado del entorno. En otras palabras, fomentar el conocimiento para promover la conservación. Para muchas niñas y niños, esta es la primera experiencia real en el bosque.
“Es un momento en el que pueden salir más allá de los muros y de las pantallas, porque, aunque vivan en plena región amazónica, no tienen la oportunidad de conocer de cerca el bosque, de vivir la naturaleza y dimensionar la biodiversidad que existe aquí en la Amazonía del Mato Grosso”, comenta la bióloga Mariana dos Santos.
Los proyectos de educación ambiental están dirigidos a estudiantes de entre 5 y 11 años. Las visitas al bosque son guiadas por monitores experimentados.
Educación Ambiental
La experiencia deja huella, como relata la propia Mariana dos Santos. Fue recién a los 11 años, tras una invitación de la FEC, que ella y muchos de sus compañeros conocieron por primera vez la selva.
La actividad formaba parte del Programa Escuela de la Amazonía, que existe desde 2002 y contempla tres proyectos educativos. “Nuestra clase participó del proyecto Teles Marginatus, sobre el mono araña de cara blanca, una especie endémica de nuestra región. Estuvimos tres días acampando en una isla para aprender sobre sus hábitos. Fue una experiencia inolvidable”.
Mariana aún no lo sabía, pero aquella expedición definiría su vocación profesional. Estudió Ciencias Biológicas en la Universidad Federal de Mato Grosso y hoy coordina el Programa de Educación Ambiental de la fundación.
Fundación Ecológica Cristalino
La FEC fue creada para promover la conservación de la Reserva Cristalino, y combina la gestión de unidades de conservación, bioeconomía, políticas públicas, educación ambiental, investigación científica y comunicación como estrategia de protección. Junto con otras cuatro reservas privadas, el área gestionada por la fundación supera las 11.000 hectáreas e integra el mayor corredor ecológico de la región, conocido como el “Arco de la Deforestación”.
El nombre no es casual. Esta zona forma parte de la extensa franja del sur amazónico que ha sido sistemáticamente devastada en las últimas décadas. La expansión de la frontera agrícola fue seguida por la extracción de oro, luego por la ganadería y, más recientemente, por el cultivo de soja.
Al observar el avance de la deforestación en Alta Floresta, la presidenta de la fundación, Vitória da Riva Carvalho, decidió conservar sus tierras. Primero creó el Cristalino Lodge, un hotel de selva reconocido internacionalmente por sus proyectos de ecoturismo, especialmente por la observación de aves, monos y mariposas.
Después, estableció la primera Reserva Particular del Patrimonio Natural (RPPN) en el Cristalino. Una vez que un área se declara RPPN, ya no puede ser comercializada. Esa tierra queda protegida por ley para siempre.
Conservación de la Amazonía
Con el tiempo, Vitória fue adquiriendo más tierras y transformándolas en reservas privadas. Hoy, las RPPNs del Cristalino son fundamentales para la protección de la biodiversidad del Mato Grosso, ya que se conectan con otras reservas, parques y territorios indígenas.
La FEC se creó hace 26 años para apoyar las acciones de conservación en estas reservas. La organización participa en consejos ambientales de Alta Floresta y alrededores, gracias a sus activos ambientales y a la producción de conocimiento científico. Algunas especies animales, por ejemplo, solo se encuentran en esta región.
“Siempre realizamos el monitoreo de la biodiversidad, incluso para asegurarnos de que el ecoturismo del Cristalino Lodge no genere impactos negativos en la zona. Porque cuando Vitória fundó la organización, su objetivo era justamente mostrar el valor del bosque en pie”, explica Mariana.
Alta Floresta
La mayoría de las acciones se financian con la tasa de conservación que se cobra a las personas que visitan las RPPNs. Además, la fundación participa en convocatorias, recibe donaciones y colabora con otras organizaciones, como el Instituto Centro de Vida.
Los recursos se destinan a distintas áreas, entre ellas, los proyectos de educación ambiental. Solo el Programa Escuela de la Amazonía ha alcanzado a más de 11.000 estudiantes de Alta Floresta desde su implementación.
“El Programa de Educación Ambiental ha sido clave porque trabajamos en conjunto con las escuelas y la comunidad. Porque no se puede hacer nada en soledad. Es esencial sensibilizar a toda la población sobre la importancia de conservar”, subraya Mariana.
Conciencia Ambiental
La FEC también comenzó a trabajar en educación ambiental con estudiantes de secundaria, de entre 15 y 18 años. El proyecto Alianza Cristalino Sin Fuego dialoga con productores de la agricultura familiar sobre el impacto de las quemas.
Se desarrolla en asentamientos rurales cercanos al Parque Estatal Cristalino, con el objetivo de prevenir incendios forestales. Este proyecto innova al incluir a jóvenes de escuelas rurales en el debate sobre el cambio climático y la crisis hídrica. “Nos guste o no, eso ya está afectando nuestra región”, advierte Mariana.
Para la bióloga, los proyectos educativos son esenciales para generar conciencia entre niños y adolescentes.
“Alta Floresta es una ciudad con muchos fragmentos de bosque, pero hoy la mayoría de las infancias y juventudes no conocen el bosque. Así que, aunque esté tan cerca, a la vez está lejos. Por eso queremos que se sientan parte del bosque. Porque muchas veces piensan que la Amazonía está en otro lugar. Pero nosotros estamos en el sur de la Amazonía, en la Amazonía de Mato Grosso”, concluye.
¡Apoyá esta causa!
Conocé más sobre los proyectos ambientales de la FEC a través de su sitio web y sus redes sociales en Instagram y LinkedIn. La FEC también cuenta con un excelente programa de voluntariado. ¡Sumate!